La oscuridad exterior
Al escribir
estas líneas mis emociones son confusas, como el tripulante de un
navío ante la incertidumbre del mar bajo la tormenta. Cormac McCarthy es un
gran narrador, sus libros Meridiano de
Sangre y La Carretera son grandes
obras, no cabe la menor duda. Conociendo ya parte de su trabajo literario y de
sus finales odiados, esos que dejan en el lector interrogantes con
muchas posibles respuestas terminando en la nada, tomé el riesgo y retrocedí en
el tiempo, exactamente al año 1965 cuando se publicó su libro La oscuridad exterior. A pesar de
sentirme seguro del camino a recorrer, caí en la trampa. Una vez más McCarthy invade
mis convicciones, mis creencias y fe en nuestra humanidad.
La historia
se desarrolla en una cordillera indeterminada de Los Apalaches a finales del sigloXIX. Una mujer da a luz a un hijo
producto de la relación incestuosa con su hermano. Holmes, padre del pecado,
decide abandonar al niño en el bosque. Desea olvidar y enterrar su presente
nefasto, sin darse cuenta que con su acto ha desatado el infierno en la tierra.
Su hermana decide ir a buscar al niño aunque Holmes le ha dicho que el bebé ha
fallecido de causas naturales. Ambos emprenden una travesía sin sentido, un
andar motivado por las culpas. Él, buscar a su hermana que se ha fugado. Ella,
conseguir al hijo no deseado.
El ambiente
árido y hostil que envuelve a los personajes a lo largo de su recorrido es impactante.
En la travesía varios de ellos son hombres y mujeres en su estado natural, donde
la fuerza y el arrebato son principios de vida conjugando así La oscuridad exterior.
Hasta el
día de hoy creía ser inmune, poseedor de una coraza infalible ante las
historias más duras ya escritas. Como una Caja
de Pandora mi seguridad ha sido despedazada por la pluma de un mortal con
el don de narrar perturbadoras historias.
Cormac
McCarthy es poseedor de una fuerza única, haciendo que el lector se sienta
ultrajado, despojado de sus sueños, temeroso de sus libros.
La
narrativa es una herramienta maravillosa, creadora, alimentadora de dulces
sueños. Pero cuando esa herramienta cae en manos de escritores como McCarthy,
puede convertirse en un arma que deja profundas cicatrices.
Increíble reseña, te felicito. Yo nunca he leído nada de este autor: dicen que es crudo. Y la verdad es que la historia así me hace intuirlo.
ResponderEliminarCreo que lo buscaré y lo leeré. ¡Un saludo!